Avanzar hacia una sociedad más digna y justa que favorezca la igualdad real entre hombres y mujeres. Con ese objetivo, los distintos grupos con representación municipal han acordado la redacción de un manifiesto conmemorativo del 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres, que se eleva mañana viernes al Pleno del Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi para su aprobación.

En el manifiesto se habla de la necesidad de impulsar un gran pacto institucional, político y social contra la violencia de género y de acabar con la prostitución y la trata de seres humanos. Así mismo, se incide en la importancia de apostar por una economía de la igualdad, que acabe con las diferencias salariales y elimine las barreras en el acceso, permanencia y promoción en el empleo. En el ámbito de la educación, el manifiesto subraya la relevancia de trabajar la igualdad desde las edades más tempranas.

Esta es una de las mociones que debatirá mañana la corporación municipal de l’Alfàs del Pi.

Por otro lado, también se elevará al Pleno la autorización de constitución de hipoteca a favor del Club Noruego Costa Blanca. “La nueva sede del Club Noruego se construyó en una parcela de titularidad pública cedida por el Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi y, por tanto, ahora el Pleno debe autorizar al club para que pueda constituir una hipoteca sobre el inmueble”, explicó el portavoz del equipo de Gobierno, Toni Such. “Subrayar que lo que se hipoteca es el edificio y no el suelo”, puntualizó el edil, quien añadió que “se trata de un procedimiento que permite la ley y que se ha hecho en otras ocasiones”.

El Club Noruego Costa Blanca, con más de 45 años de presencia en el municipio, aglutina a un colectivo que supera el millar de socios. En marzo de 2014 abrieron las puertas de su nuevo centro social, un edificio multifuncional y moderno de 500 metros cuadrados, que construyeron en una parcela municipal cedida por el Ayuntamiento de l’Alfàs. Algunos socios adelantaron el dinero para financiar el edificio. Lo que el club pretende ahora es hipotecar el inmueble y devolver a estos socios sus aportaciones. Para ello necesitan la autorización del Pleno, ya que el centro se erige en una parcela cedida por el consistorio.