La parcela de titularidad privada de 9.500 metros cuadrados está ocupada en parte por el edificio destinado a la sede cultural, quedando los restantes 2.100 metros cuadrados de explanada para otros usos. La Fundación Cultural Frax, como ya ha explicado siempre que ha tenido oportunidad su presidente, Matías Pérez Such, decidió asfaltar el solar hace ya dos años, una actuación que no sólo transformaba un pedregal en un parking, sino que duplicaba su capacidad pasando de 90 plazas escasas a las 180 actuales.

Si bien es cierto que el convenio suscrito en su día, ratificado nuevamente por un mismo montante de 6.000 euros, recupera para aparcamiento público un solar en estado de abandono, también lo es que no está reñido con otros usos, como bien matizaba el presidente de la Fundación Frax, se trata de una propiedad privada.