De nuevo el éxito de la convocatoria fue rotundo gracias a la particpación de los 300 senderistas de todas las edades que no quisieron perderse esta caminata.

Entre las curiosidades de esta sexta edición se cuenta la participación de caminantes de más de 10 nacionalidades diferentes que tuvieron la oportunidad de hacer el descenso desde Guadalest hasta Altea por el cauce del río, con la luna llena como único testigo y con una suave brisa nocturna que hizo más llevadera la marcha.

La organización logística estaba en manos de la Agencia de Turismo Activo Marco Polo de Benidorm asegurando el apoyo con vehículos 4×4 para el avituallamiento de agua a los aprticipantes , y un coche escoba para ayudar en caso de posibles lesiones y para el montaje de una carpa de recepción y llegada con unos merecidos snacks, bebidas frescas y fruta para todos los participantes.

Destacar que la colaboración entre los ayuntamientos de Altea y L ‘Alfàs del pi no ha hecho otra cosa que enriquecer y mejorar la organización y el desarrollo de la Caminata Nocturna que desde hace seis años se convoca por inciativa de la FENWA y la concejalía de deportes de l’Alfàs del Pi.