Los Trisagios son oraciones cantadas en acción de gracias y ruegos, que se celebran durante tres días consecutivos en honor al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo y que destacan por su armonía única, “una cosa muy peculiar de l’Alfàs del Pi”, apuntó Schiller. Actualmente componen el coro del Trisagio una quincena de personas, la mayoría mujeres. “Una tradición que ha ido pasando de madres a hijas, generación tras generación”, señaló Vicente Arques, alcalde de l’Alfàs del Pi.

Este año presidió el Trisagio en honor al Espíritu Santo el prior de la Iglesia de San Carlino de Roma, Pedro Aliaga, quien también participó en la procesión del Santísimo Sacramento.

Las Fiestas del Jubileo y del Santísimo Cristo del Buen Acierto destacan, desde el punto de vista religioso, porque todos los años se conceden indulgencias plenarias a los fieles que reciben el Sacramento de la Confesión, participan en la exposición del Santísimo Sacramento y rezan ante el Santísimo Cristo del Buen Acierto. “Fue en 1857 cuando el Papa Pío Nono concedió al pueblo de l’Alfàs del Pi la indulgencia plenaria”, recordó el párroco de l’Alfàs, Miguel Ángel Schiller.