El Ayuntamiento de l’Alfàs incorpora un desfibrilador semiautomático a uno de los vehículos de la Policía Local para asistir a personas que hayan sufrido un infarto

 

El Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi ha incorporado a uno de los coches patrulla de la Policía Local un desfibrilador semiautómatico (DESA) con el objetivo de que los agentes puedan prestar ayuda de forma inmediata y con una herramienta eficaz a aquellas personas que requieran su presencia por un caso de parada cardiaca, infarto o muerte súbita.

Esta unidad policial está identificada como ‘Vehículo Cardioprotegido’ con el fin de que la ciudadanía pueda reconocerla por la vía pública y saber que dispone de un instrumento de reanimación. Además, los agentes han recibido un curso especializado sobre el manejo del desfibrilador y sobre nuevas técnicas de resucitación cardiopulmonar (RCP), para que puedan actuar en momentos de emergencia.

El alcalde de l’Alfàs del Pi, Vicente Arques, y las ediles de Sanidad, Marisa Cortés, y de Seguridad Ciudadana, Genoveva Tent, han asistido a la presentación del nuevo vehículo cardioprotegido junto al jefe de la Policía Local, Joaquín Ortiz, el director de Medicardio, José María Muñoz, y varios de los agentes que han sido formados en el uso del DESA.

Los cinco minutos posteriores a una parada cardiorrespiratoria son claves para el enfermo, ya que en ese tiempo la falta de oxígeno y sangre en el cerebro pueden causar daños irreversibles e incluso la muerte. “De ahí la importancia de poder contar con estos aparatos y con gente formada que pueda actuar en los primeros minutos”, ha subrayado el alcalde.

Los agentes de la Policía Local suelen ser los primeros en llegar ante un aviso. “Este vehículo puede ayudar a salvar vidas en casos de emergencia, reduciendo al máximo el tiempo de respuesta en caso de que alguien sufra una parada cardiaca”, ha añadido la concejala de Seguridad Ciudadana.

L’Alfàs del Pi cuenta con cinco espacios cardioprotegidos dotados de desfibriladores semiautomáticos para utilizar en situaciones de emergencia, ubicados en la Casa de Cultura, en el polideportivo municipal, en el pabellón Pau Gasol, en el campo de fútbol de l’Albir y ahora también en un coche radiopatrulla de la Policía Local. Así mismo, se ha formado a más de medio centenar de personas, entre trabajadores municipales, agentes policiales y técnicos deportivos, en el manejo de estos aparatos.

“No sólo nos aseguramos de contar con los medios materiales para salvar vidas en caso de que sea necesario sino, sobre todo, con personal con los conocimientos básicos para realizar una atención eficiente antes de que lleguen los servicios sanitarios”, ha declarado la edil de Sanidad.

Un municipio cardioprotegido es aquél que dispone de desfibriladores semiautomáticos en espacios públicos y dependencias municipales, para ser usados en caso de que una persona padezca una parada cardiaca, actuando de forma eficaz y rápida y activando el protocolo de actuación de emergencia. “La parada cardiaca no avisa, y cuanto antes se actúe mayores son las probabilidades de supervivencia y de reducción de secuelas posteriores”, ha manifestado Cortés. De ahí que l’Alfàs haya apostado por convertirse en municipio cardioprotegido.