Un año más, la concejalía de Bienestar Social del Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi ha querido despedir a los niños y niñas saharauis del programa ‘Vacaciones en Paz’ organizando una fiesta de convivencia en la piscina municipal, a la que han asistido junto a sus familias de acogida.

 

Gracias al programa ‘Vacaciones en Paz’ cientos de niños procedentes de los campos de refugiados del Sahara comparten los meses de julio y agosto con familias de distintos puntos de España. Aquí a la comarca han llegado 12 menores -6 niños y 6 niñas- de edades comprendidas entre los 10 y los 13 años, a través de la Asociación Expedición Juita-Amigos del Pueblo Saharaui de la Marina Baixa. Los pequeños, que regresarán el próximo lunes a casa, han sido acogidos por familias de l’Alfàs del Pi, Altea y Benidorm.

El presidente de la asociación, Quim Sanblancat, ha agradecido el cariño y la solidaridad de estas familias, que hacen posible que cada año un grupo de menores disfrute de unos días de descanso lejos de los campamentos de refugiados del Sahara donde residen. “Ha sido un verano tranquilo. Los pequeños han pasado sus revisiones médicas y las familias se han reunido con frecuencia, participando en actividades de ocio, especialmente en el medio acuático, ya que lo que más les gusta a estos niños y niñas es poder bañarse, tanto en el mar como en la piscina”, ha señalado Quim Sanblancat.

Durante dos meses, estos menores conviven con familias de acogida para evitar el calor extremo que se vive en los campamentos de refugiados saharauis. Por las condiciones de su entorno, llegan con carencias alimentarias y sanitarias. Por ello, durante el tiempo en que están en España, se les hacen diversas revisiones médicas y se les tratan las enfermedades, si fuera necesario, reforzando su alimentación con una dieta rica y variada. Este año, como novedad, gracias a la colaboración con la Facultad de Farmacia de Valencia, se ha realizado a estos 12 niños y niñas una serie de analíticas exhaustivas con el fin de poder detectar problemas de salud y así poder tratarlos, ha explicado el presidente de la asociación.

Una vez más Quim Sanblancat ha aludido al paulatino descenso de familias acogedoras debido a la crisis económica. “Antes llegaban a España cada verano una media de 10.000 niños y niñas y ahora no se superan los 5.000”, ha declarado.

Desde el Ayuntamiento de l’Alfàs, las ediles de Bienestar Social, Vicenta Baldó, y de Juventud, Isabel Muñoz, han reiterado el apoyo del Gobierno local al pueblo saharaui. L’Alfàs colabora desde hace años, a través de un convenio económico de 6.000 euros, en la puesta en marcha y mantenimiento de una escuela para menores ciegos en Tinduf, que desde noviembre de 2016 atiende también a niños y niñas sordos. “Son 17 chicos y chicas con problemas visuales y de audición lo que asisten a esta escuela, que es atendida de forma extraordinaria por 5 monitoras y una directora”, ha manifestado Sanblancat.

El presidente de la Asociación Expedición Juita ha incidido en la necesidad de mejorar la atención que se da a los niños y niñas con discapacidades notables en los campos de refugiados. De ahí que, desde la entidad que preside, se hayan propuesto “conseguir más dinero para ver cómo podemos ayudar en este sentido”.

La Asociación “Expedición Juita” Marina Baixa se creó en 1998 y actualmente cuenta con aproximadamente un centenar socios. El Ayuntamiento de l’Alfàs de Pi colabora con esta entidad en varios proyectos, entre ellos el mantenimiento de la escuela para niños con discapacidad visual y auditiva de Ausserd, en los campamentos de refugiados saharauis de Tinduf, que se construyó con la ayuda del consistorio. También en el Programa Vacaciones en Paz y en las caravanas solidarias que impulsa la asociación con el fin de enviar alimentos y medicamentos a los campamentos de refugiados.