El pasado viernes se celebraba el primer concierto del Festival ‘Música a la llum de la lluna de l’Albir’, en el mirador de la Cala del Amerador, con un recital a cargo de Equinox Dúo.
El mirador de la cala del Amerador, en la playa de l’Albir, se ha convertido un año más en uno de los escenarios de la VIII edición del Festival de conciertos a la llum de la lluna de l’Albir. Para ser más exactos del primero de todos, que tenía lugar el pasado viernes, y está incluido en la programación cultural municipal veraniega ‘Estiu Festiu 2024’. Como destacaba el concejal de Cultura, Manuel Casado, en la presentación de la nueva edición “nuestra intención es llevar la cultura a la calle y a todos los sectores poblacionales”, y además a espacios de gran valor medioambiental como la cala del Amerador donde se ha estrenado la octava edición del Festival.
Equinox Dúo interpretaba un recorrido por la música italiana, desde el repertorio clásico de las Variaciones hasta el Carnaval de Venecia, y desde la Tarantella de Rossini hasta la composición napolitana, desde la ópera hasta la música de cine y canciones expresamente dedicadas al Dúo Equinox.
Los próximos conciertos del Festival a la llum de la lluna de l’Albir serán los viernes 9 y 30 de agosto, irán cambiando los escenarios y horarios, el 9 en el Museo Villa Romana de l’Albir a las 22.30 horas y el 30 de agosto en el Centro Social de l’Albir a las 22.00 horas. Todos los conciertos son gratuitos y están dirigidos a todos los públicos.
El segundo concierto será el viernes 9 de agosto a las 22.30 horas en el Museo Villa Romana de l’Albir. Flamenco Soul con el grupo C.Piñana & Group. Cuerpo y alma, materia y espíritu…pone en relación dos conceptos aparentemente antitéticos en un sólo ser dialéctico que refleja la esencia de la música y su carácter esquivo. El grupo propone un viaje místico a las profundidades del flamenco.
El tercer concierto será el viernes 30 de agosto, a las 22.00 horas, en el Centro Social de l’Albir. Un recital de piano a cargo de Emil Ribarski. nacido en una familia de músicos profesionales.
Al placer de escuchar buena música en directo, se añade un escenario extraordinario, como el mirador de la cala del Amerador, lo que convierte la cita en única y ofrece una panorámica espectacular, máxime a la luz de la luna en estas cálidas noches de verano.