Todos los presentes han coincidido en resaltar la marcada personalidad del polifacético artista belga, pintor, músico, marino… algo que resalta a primera vista en la exposición, abierta al público en la Sala Ramón de Soto de la Fundación Frax, espacio privilegiado donde va a permanecer hasta el 30 de septiembre. De la misma forma ha quedado patente una vez más el carácter abierto de l’Alfàs del Pi, detalle que no ha pasado desapercibido a la Cónsul de Bélgica, Dominique Schoofs, que ha destacado el importante número de conciudadanos residentes en esta tranquila población de la Marina Baixa cuya personalidad marcada por la variopinta procedencia de sus ciudadanos ha sacado a relucir el alcalde, Vicente Arques, como uno de los atractivos más valiosos, por enriquecedor, del municipio. La exposición ha unido la Fundación constituida en Altea Marc Abel y a la Fundación Frax de l’Albir detalle que ha resaltado el presidente de esta última, Matías Pérez Such dispuesto a repetir la experiencia.

Evelyn constituyó tras la muerte de su marido la Fundación Marc Abel con el objetivo de dar a conocer al mundo su obra pero también poder ayudar a quienes buscan un hueco a través del arte, una aventura casi imposible. Su viuda ha seleccionado para la ocasión una recopilación de varias épocas “desde el más puro expresionismo a cuadros cósmicos” y su intención es mostrarlos próximamente en la Casa Museo creada en Bélgica “yo me enamoré de la pintura antes de conocer al artista y no voy a venderlos nunca” manifiesta rotunda esta mujer vitalista encantada de colaborar por primera vez con la Fundación Frax a quien agradece al igual que al Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi su apoyo.