La oferta patrimonial de l’Alfàs del Pi se está convirtiendo en uno de sus grandes atractivos turísticos. Así se desprende de los datos facilitados por la concejalía de Cultura y Patrimonio. En 2017 más de 53.500 personas visitaron el Centro de Interpretación Faro de l’Albir y el Museo al Aire Libre Villa Romana. Además, se contabilizaron 131.352 visitas en el camino al faro, una de las rutas del Parc Natural de Serra Gelada que más afluencia de público registra por su accesibilidad y por contar con el único faro cultural de toda la Comunidad Valenciana.

 

“Al no disponer de un sistema de control automatizado, los registros de visitantes en la ruta roja del parque natural se desarrollan únicamente mientras hay personal en el punto de información, por lo que el número real de visitantes es mucho mayor”, ha puntualizado la edil de Cultura y Patrimonio de l’Alfàs, Mayte García.

El Centro de Interpretación Faro de l’Albir abrió sus puertas en octubre de 2011. Actualmente acoge exposiciones fotográficas que reflejan cómo era la vida de los antiguos torreros, cuando el faro estaba habitado, y también describen la importancia de la flora y la fauna del parque natural. En 2017 recibió 42.987 visitas, siendo los meses de marzo (4.330), abril (7.143), octubre (4.958) y noviembre (4.677) los que mayor actividad registraron. “Hemos detectado una mayor afluencia de visitantes al Centro de Interpretación del Faro de l’Albir en puentes como el del 9 d’octubre y periodos vacacionales como la Semana Santa”, ha explicado García.

Por lo que respecta al Museo al aire libre Villa Romana de l’Albir, en 2017 se contabilizaron 11.162 visitas. Los meses de marzo y abril, con 1.680 y 1.498 visitantes registrados, respectivamente, fueron los de mayor afluencia, seguidos de febrero y agosto, periodos en que el número de visitas también superó el millar.

Pionero en la aplicación de la tecnología 3D sobre yacimientos al aire libre, este museo, abierto en marzo de 2011, ofrece al visitante la posibilidad de visualizar virtualmente el conjunto de las termas gracias a una aplicación para iPad que muestra la arquitectura original sobre los restos arqueológicos y ofrece un recorrido para comprender el funcionamiento de cada una de las estancias de los baños.

Este es el primer Museo al Aire Libre de la Comunidad Valenciana. Abrió sus puertas en 2011 y ya acumula más de 60.000 visitas. En 2016, gracias a un taller de empleo de arqueología, se amplió la zona visitable del museo con la prolongación de la pasarela hasta uno de los edificios principales de la villa, una estancia absidiada bastante grande denominada oecus. El museo cuenta, además, con una Sala de Audiovisuales, en la que se exponen 45 piezas de relevante valor, descubiertas en el yacimiento alfasino en las excavaciones realizadas desde 2008.

Proyecto de Recuperación del Patrimonio Histórico

“Desde el equipo de Gobierno existe el compromiso de seguir apostando por la recuperación y la conservación de los bienes culturales y patrimoniales de l’Alfàs, con el fin de ponerlos en valor y convertirlos en atractivos turísticos para el municipio”, ha subrayado Mayte García. Una estrategia política del equipo de Gobierno socialista que ha permitido la rehabilitación de edificios y espacios emblemáticos como el Faro de l’Albir, les Escoles Velles, el Cuartel de Carabineros, la Villa Romana de l’Albir, la cantera de Serra Gelada o el parque Los Carrascos, convertido en un Centro de Interpretación Paisajística y Medio Ambiental vinculado al Parc Natural.

García ha reiterado el compromiso del equipo de Gobierno en la recuperación del patrimonio histórico y su puesta en valor. En este sentido, se ha referido al proyecto de recuperación del Molí de Mànec que el Ayuntamiento de l’Alfàs ha presentado a los Fondos FEDER de la Generalitat Valenciana. “Su mal estado de conservación requiere una actuación de emergencia para evitar la caída de los muros que se mantienen en pie, lo que supondría perder un bien patrimonial del Reg Major”, ha explicado la concejala.

De los seis molinos existentes en l’Alfàs del Pi, el llamado Molí de Mànec es el único de propiedad municipal. Su valor histórico patrimonial queda acreditado en 2015 al ser catalogado como espacio protegido del municipio como Bien de Relevancia Local. El Ayuntamiento de l’Alfàs estima en unos 200.000 euros la inversión necesaria para realizar esta actuación de urgencia, que ha presentado a los Fondos FEDER de la Generalitat.