La Red Innpulso, Red de Ciudades de la Ciencia y la Innovación, promovida por el Ministerio de Ciencia e Innovación del Gobierno de España, recoge las clases impartidas por videoconferencia desde el Centro de Formación Ocupacional de l’Alfàs como un ejemplo de innovación de buenas prácticas frente al COVID-19.
Con el objetivo de potenciar la innovación en el municipio, El Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi ingresó en 2016 en esta exclusiva Red, a la que pertenecen 72 localidades españolas. Las concejalas Rocío Guijarro y Dolores Albero son quienes representan al Ayuntamiento de l’Alfàs, en esta plataforma para la promoción y difusión de políticas innovadoras. Con acciones para afrontar al coronavirus, como la reanudación de las clases teóricas en el CFO, gracias a la homologación del Centro de Formación Ocupacional conseguida en tiempo y forma, permitiendo impartir las clases en lugar de manera presencial, y durante todo el tiempo que se prolongue el estado de alarma, a través de un servicio de videoconferencia, y para que esto sea posible, haber facilitado ordenadores portátiles a los 25 alumnos que así lo han solicitado.
Desde l’Alfàs se fomenta durante el confinamiento una batería de actuaciones, en materia de innovación, desde todos los departamentos municipales, con el objetivo de ofrecer un mejor servicio a la ciudadanía con la ayuda de las nuevas tecnologías. Un esfuerzo que se recoge a través de la Red de Ciudades de la Ciencia e Innovación, y supone un acicate para continuar trabajando en la misma dirección.
En estos momentos todas las áreas municipales de l’Alfàs, educación, deportes, cultura, juventud, bienestar social, residentes de otras nacionalidades… trabajan de manera coordinada con el departamento de informática, para convertir la innovación en la mejor aliada para frenar la expansión del coronavirus.
Fue en 2016 cuando el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades concedió esta distinción al Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi, necesaria para entrar a formar parte de la Red Innpulso, Red que pretende establecer un modelo productivo sostenible, desde el punto de vista económico, social y ambiental, basado en el conocimiento y la innovación, propiciando la colaboración e intercambio de experiencias.