Tras la celebración del Trisagio en la Iglesia de San José, patrón del municipio, cientos de festeros se han dado cita en la tradicional Ofrenda de Flores, al Santísimo Cristo del Buen Acierto de l’Alfàs del Pi, donde el párroco Miguel Ángel Schiller ha recibido a los pies del altar a la alegre comitiva, tras su breve desplazamiento desde la explanada de la Casa de Cultura, al ritmo de la xirimita y el tabalet.

Una Iglesia muy concurrida durante estos días de fiesta, por la celebración del Trisagio para alcanzar el Jubileo. El Trisagio Alfasino, patrimonio inmaterial de l’Alfàs, un documento sonoro exclusivo con más de 160 años, que tan solo suena en las Fiestas del Santísimo Cristo del Buen Acierto de l’Alfàs del Pi, cada mes de noviembre, remontando a quienes participan en la ceremonia, a la llegada de la imagen al pueblo el 26 de marzo de 1857, iniciándose entonces las reformas en la capilla “para dar cabida a un Crucifijo de estatura más que natural…”, según se recoge en el libro Historia de un Legado de Ángela Castillejo, Rafael Frías y José Soler. Al mismo tiempo, el Canónigo Pascual Baldó, según se explica en el mismo libro, “inicia los trámites para obtener de Su Santidad Pío IX una gracia por la que se de mayor realce a la Imagen”, un Jubileo anual de cuarenta horas que podrá tener lugar en los tres días anteriores a la celebración del Santísimo, la Exaltación de la Cruz, y permitirá a quienes visiten dicha Capilla obtener indulgencia plenaria, una concesión que llega del Pontífice el 10 de julio del mismo año en que se solicita.

La participación ciudadana en la Ofrenda Floral al Cristo ha sido importante, incluso se han visto muchos niños y niñas, lo que garantiza la continuidad de la fiesta.

Flores y más. Desde hace años, también se llevan alimentos y bienes de consumo básicos, que se depositan en los aledaños del recinto, destinados a la asociación local del voluntariado. Han sido muchas las donaciones, y así lo ha destacado y agradecido el alcalde del Ayuntamiento de l’Alfàs, Vicente Arques.