Gracias al convenio de colaboración entre la Generalitat Valenciana y los ayuntamientos de Altea, Benidorm y l’Alfàs del Pi y C.N de Altea, para la vigilancia, control y gestión de la zona marítima incluida en el Parque Natural de la Serra Gelada se establece que una de las funciones básicas encomendadas al servicio de vigilancia marina del Parque Natural es el cumplimiento de la normativa propia del espacio protegido, a través de la realización de aquellos controles que sean necesarios para la protección medioambiental marina, detectando e identificando los posibles incumplimientos de la normativa aplicable que supongan un perjuicio para el medio marino, evitándolos en la medida de lo posible.

En este sentido, se ha establecido un protocolo por parte del servicio de vigilancia marina del PN para la realización de rutas de vigilancia en horarios y zonas aleatorios, con la finalidad de garantizar el cumplimiento de la normativa propia del PN en relación al fondeo libre de embarcaciones de recreo y a la velocidad de navegación, tal y como se establece en el PORN del Parc Natural de la Serra Gelada y su entorno litoral.

Para éste tipo de intervenciones el criterio seguido por el servicio de vigilancia ha sido siempre el de realizar una labor informativa y educativa, no sancionadora, realizando informes de infracción que pueden derivar en sanción administrativa solamente en los casos más reiterativos.

Así pues, entre los meses de enero y agosto del 2020 se han informado a un total de 255 embarcaciones de recreo y a otros 29 usuarios náuticos, de las cuales 205 de estas intervenciones están relacionadas con el incumplimiento del propio PORN del PN y el resto por el incumplimiento del resto de normativa aplicable en el espacio.

De todas ellas el 55,65 % de las intervenciones se han realizado en las aguas del término municipal de l’Alfàs del Pi, el 28,63 % en las aguas del término municipal de Altea y el 1 5,72 % en las aguas del término municipal de Benidorm. En relación con éstos datos hay que tener en cuenta que, aunque durante los meses de verano ha habido un incremento significativo en la presencia de embarcaciones recreo en las aguas del PN con respecto a otros años, durante los meses de confinamiento la presencia de embarcaciones ha sido prácticamente nula.