La meteorología del mes de febrero en el que las temperaturas han sido excepcionalmente altas ha provocado que antes de tiempo prolifere en la gran masa forestal de pinos del municipio de la oruga procesionaria que supone un auténtico peligro para los niños y los animales de compañía.

Las recomendaciones de los expertos para este caso son evitar el contacto con estos insectos a toda costa, pues pueden hacer enfermar de gravedad a quien las toque, la Concejalía de Medio Ambiente ha iniciado una campaña de eliminación de esta oruga de los arboles del municipio. Tambien desde la Concejalía de Medio Ambiente se ha advertido a los propietarios de parcelas privadas, en las que se han detectado la presencia de este insecto que procedan eliminarlo.

La Concejalía de Medio Ambiente ha querido advertir sobre el riesgo que pueden suponer estas larvas para las personas y animales, ya que la inhalación de los finos pelos de la oruga, donde oculta su veneno, puede producir desde urticarias hasta reacciones alérgicas, especialmente en los niños.

La oruga suele presentarse siempre en forma de procesión y se ubican cerca de los pinos donde instalan unos bolsones blancos de hasta 20 cm en los que se desarrolla la larva. Precisamente esas procesiones de este insecto es lo que “resulta muy llamativo para los pequeños, que tienden a tocarlas por curiosidad.

Por otra parte , perros y gatos son especialmente vulnerables ya que en ocasiones se las comen y se tragan todo el tóxico que contiene el insecto, con lo que pueden llegar a sufrir una necrosis en la garganta y en la lengua.

Si los pelillos de las orugas entran en contacto con las mucosas o con los ojos de los animales, los síntomas suelen ser picores, urticarias y sensación de quemazón y si la tocan suelen comenzar a babear y a rascarse la zona de la boca. Ante este riesgo, el principal consejo es acudir cuanto antes a la clínica veterinaria.

Por último los árboles que albergan las larvas de oruga procesionaria también suelen resultar dañados por su presencia ya que el insecto necesita alimentarse de las acículas de los pinos para crecer . Las larvas, no llegan a matar el árbol, pero las defoliaciones que pueden ser a veces muy aparentes.