Es una especie de auto a pedales, híbrido entre hidropedal y bicicleta, de color verde ecológico. Va equipado en el techo con una placa solar para poder recargar sus móviles y tablets. Según ellos, su aventura reivindicativa no tiene por qué perder el sentido del humor y apela al sentido común, denunciando el excesivo consumismo de nuestra sociedad y en especial el energético. Nosotros nos hacemos eco de su paso y les deseamos feliz término. El viaje lo financian con la venta ambulante de sus productos de artesanía: chapitas, monederos de cuero reciclado, llaveros y camisetas con sus diseños.