L’Alfàs del Pi se ha convertido un año más en punto de encuentro para los amantes del enoturismo gracias a la primera Mendoza’s Wine Lovers Edition, que se ha desarrollado esta Semana Santa en las instalaciones de Bodegas Enrique Mendoza. Uno de los mayores atractivos del evento ha sido la cata guiada en la cava subterránea de la bodega. El aficionado ha podido meterse en la piel del enólogo y pipitear directamente de las barricas los nuevos Monastrell de Mendoza.

La jornada ha incluido la cata de 10 vinos Enrique Mendoza, entre ellos el Santa Rosa, además de un buffet libre en el que se han podido degustar los 100 quesos artesanos más importantes de Europa. También se ha desarrollado una cata de añadas antiguas 94 y 96, un taller de agricultura ecológica y una cata práctica sobre el aroma del corcho en el vino ‘Bouchoné’. Así mismo, se ha presentado el cóctel Amaro-Dolç de Mendoza, elaborado por la bartender Marina Canales.

 

 

 

 

 

Es el sexto año que Bodegas Enrique Mendoza ha abierto las puertas de su casa en Semana Santa para invitar a los winelovers a participar en un evento de enoturismo. L’Alfàs del Pi es el único municipio de la comarca de la Marina Baixa integrado en la Ruta del Vino de Alicante. En los últimos años, el enoturismo y la cultura entorno al vino se han perfilado como una vía complementaria de creación de empleo y de generación de riqueza, una herramienta de promoción turística muy interesante que permite posicionar la marca l’Alfàs en todo el mundo.

Bodegas Enrique Mendoza nace como empresa familiar en 1989, aunque el proyecto se fraguó a finales de los 70 cuando, por inquietud, Enrique Mendoza empezó a comprar, coleccionar e invertir en vino de otras bodegas como aficionado. Hoy día esas primeras plantaciones se han convertido en dos bodegas, una de crianza en l’Alfàs del Pi, con 1.400 barricas de los mejores robles americano y francés, donde embotellan y posicionan sus vinos en el mercado nacional e internacional, y otra de elaboración en Villena, en la “Finca Chaconero”, dotada de la mejor tecnología e instalaciones para fermentar las uvas de las siguientes variedades: Chardonnay y Moscatel en blancas y Cabernet Sauvignon, Merlot, Pinot, Petit Verdot, Shiraz y Monastrell en tintas. Su concienciación por la viticultura les ha llevado a crear uvas producidas sin herbicidas ni insecticidas, alimentadas sólo con compost, y viñedos llevados de forma científica apoyados en la dendrometría y la viticultura de precisión.