El precio del servicio es de 15 euros e incluye la vacuna antirrábica y la desparasitación del animal. “Todos los perros serán conducidos con cadena o correa y, en el caso de ser perros catalogados como potencialmente peligrosos o cuyo carácter así lo aconseje, sus dueños deberán llevarlos provistos de bozal”, añadió.

La rabia es una enfermedad aguda del sistema nervioso central causada por un virus que se transmite por la saliva. Afecta a muchos mamíferos, incluidos los humanos y los perros y, si no se trata con urgencia, puede provocar incluso la muerte. De ahí que todos los perros que han cumplido los cuatro meses, según la ley, deben estar vacunados obligatoriamente contra la rabia, con un periodo intervacunal máximo de dos años.