La Casa de Cultura de l’Alfàs del Pi ha sido el escenario elegido para clausurar la VII Ruta Morisca 2016, una iniciativa que tiene como principal objetivo documentar y poner en valor los distintos escenarios de la provincia de Alicante vinculados a la revuelta morisca de 1609 y 1610, recogiendo tanto los aspectos geográficos del entorno como los antropológicos, culturales e históricos. “Este año nos hemos centrado en las localidades de Altea, l’Alfàs del Pi y Benidorm y en 2017 continuaremos la ruta por la costa, desde la Cala de Benidorm y la Cala de Finestrat hasta La Vila Joiosa para concluir en la Illeta dels Banys, en El Campello”, ha explicado Manuel Pinto, impulsor de esta iniciativa.
La Ruta Morisca se inició en 2009 en Tárbena. Desde entonces ha ido recorriendo distintos pueblos de las Marinas Alta y Baixa, un proyecto con el que se pretende dar a conocer la riqueza cultural, medio ambiental e histórica de la provincia de Alicante. “Contamos con la colaboración de asociaciones culturales y ayuntamientos, una actividad voluntaria, sin ánimo de lucro, que destaca por sus fines divulgativos”, ha añadido Pinto.
Durante la jornada de clausura, desarrollada el pasado fin de semana en la Casa de Cultura de l’Alfàs, los más de 40 asistentes pudieron aprender sobre la arquitectura y el control del territorio en la Altea de los siglos XVI y XVII, el patrimonio cultural de l’Alfàs del Pi, los topónimos de Serra Gelada, el Reg Major de l’Alfàs del Pi y Benidorm o la flora del Parc Natural de Sarra Gelada. Finalmente, la velada acabó con un recital poético y con la presentación de la VIII Ruta Morisca 2017.
“La riqueza del patrimonio de la provincia de Alicante se hace patente cuando recorremos los distintos municipios”, ha declarado la edil de Cultura de l’Alfàs, Mayte García, quien ha incidido en la importancia de organizar jornadas como ésta, pues “permiten acercar a la ciudadanía el rico patrimonio natural, histórico y cultural de la provincia”.