El pleno ordinario del Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi ha aprobado la nueva Ordenanza Municipal de Convivencia Ciudadana, en el espacio público. “Un nuevo marco normativo que nos va a permitir penalizar las acciones incívicas, y al mismo tiempo, ofrecer protección social a las personas necesitadas, a través de la intervención de los Servicios Sociales”, ha declarado el portavoz del Gobierno, el socialista Toni Such.

La nueva Ordenanza viene a ser una herramienta jurídica para facilitar la tarea de la Policía Local, es conforme con los principios de necesidad, eficacia, proporcionalidad, seguridad jurídica, transparencia y eficiencia, y su objetivo prioritario es preservar el entorno urbano, y prevenir conductas que pongan en peligro la seguridad ciudadana, señala Such.

Una ordenanza de aplicación a todo el término municipal de l’Alfàs, que da respuesta y regula las actitudes irresponsables de una minoría en el medio urbano, que suponen la alteración de la convivencia en lugares como parques, fachadas, edificios públicos y privados. Acciones insolidarias y sancionables, como vertidos ilegales, pintadas o ruidos, que además se traducen en gastos para las arcas municipales en reparaciones y restituciones. “Esta ordenanza es aplicable a todas las personas que se hallen en el municipio, sea cual sea su concreta situación jurídica administrativa, a las conductas realizadas por los menores de edad y organizadores de actos públicos”, puntualiza el portavoz del Gobierno y concejal de Seguridad Ciudadana Toni Such. Sin duda “confiamos en el funcionamiento de esta ordenanza como un mecanismo disuasorio para todo tipo de comportamiento irresponsable, que pueda alterar la seguridad ciudadana”.

 

En otro orden de cosas, en la misma sesión plenaria, se ha aprobada la creación de un Jardín Cementerio para mascotas, de titularidad municipal, a iniciativa del Grupo Municipal de Ciudadanos. De manera que se iniciarán los trámites con Conselleria de Agricultura, para el establecimiento de un servicio de enterramiento de animales de compañía, la localización de un lugar idóneo de propiedad pública dentro de los límites de la localidad y la creación de una estructura organizativa, necesaria para esta prestación y el mantenimiento oportuno asociado a este futuro jardín cementerio, haciéndolo accesible y visitable para toda la ciudadanía.