Emblemático edificio abierto al público como centro cultural y medioambiental desde el pasado 16 de octubre, por decisión del Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi, empeñado en recuperar la historia que encierra dentro y fuera de sus paredes desde hace casi 150 años, el mismo tiempo que lleva marcando el rumbo a los navegantes. Un proceso progresivo de conservación y puesta en valor que incluye los 2’5 kilómetros del recorrido de acceso. Esta semana y siguiendo con los plazos establecidos la concejalía de patrimonio histórico del Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi ha iniciado los trabajos de rehabilitación del pavimento del faro de l’Albir, según ha anunciado la concejal Rocío Guijarro.
El suelo del edificio está construido con un mosaico hidráulico decorado con motivos geométricos y vegetales como nos describe la técnico municipal Carolina Frías. Cada habitación de la vivienda de los fareros estaba pavimentado con un paño diferente, “por lo que en total nos encontramos con seis motivos decorativos”. Los trabajos, que se desarrollarán durante los meses de abril y mayo, consistirán en una limpieza en profundidad con el fin de eliminar restos de cemento adheridos a la superficie, además de rellenar con mortero de cal las fracturas. Una vez finalizada la intervención se colocará un elemento de protección que permita conservar adecuadamente el pavimento, al tiempo que pueda ser contemplado por los numerosos visitantes del Centro de Interpretación del Faro de l’Albir.
Estos trabajos han permitido conocer datos hasta el momento desconocidos del faro, como que el pavimento hidráulico no es el suelo original. Cuando se construyó el edificio, en 1863, se emplearon unas losetas de ladrillo de 20 x 20 cm. Sería posteriormente, a mediados del siglo XX, en una reforma “cuando se colocarían las baldosas hidráulicas decoradas” concluye Carolina.
La restauración del pavimento del faro se enmarca dentro de las actuaciones que el Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi está llevando a cabo para proteger y divulgar el patrimonio cultural del municipio y, en concreto, de la Serra Gelada. Hemos de recordar que el pasado mes de enero se terminó la restauración de la torre Bombarda, una torre vigía del siglo XVI que el pasado 18 de marzo se incluía en la ruta interpretativa del camino del faro, dentro de la campaña promocional “We Love Sundays Albir”.