166 personas han visitado entre los meses de diciembre y junio el Molí de Mànec, ubicado en el barranco de Carbonera, parte del Reg Major, un regadío histórico cuya construcción se remonta al siglo XVII, y uno de los elementos etnológicos más significativos de l’Alfàs. Unas cifras que denotan “su elevado interés cultural y turístico”, según ha destacado el concejal de Cultura y Patrimonio Manuel Casado.
En concreto se han organizado desde las concejalías de Cultura y Patrimonio doce visitas guiadas, siempre con cita previa, en seis fines de semana de los meses de diciembre, enero, febrero, abril, mayo y junio, siempre en grupos reducidos, rutas guiadas en inglés y en castellano. Las visitas se retomarán el próximo mes de octubre según ha anunciado el concejal titular del área.
La recuperación del Molí de Mànec permite evitar la degradación de un bien declarado BRL, Bien de Relevancia Local, “pero al mismo tiempo dar a conocer parte de la historia cultural, histórica e inmaterial de l’Alfas”. De hecho está sirviendo para descubrir una zona bastante desconocida, comprendida en las partidas rurales de Carbonera y el Captivador con un peso demográfico y económico muy importante hasta mediados del siglo XX: los dos molinos, los cultivos regados por la Séquia Mare, los recursos forestales, y las 12 canteras de yeso y ofitas propiciaron una temprana ocupación y explotación de sus tierras. Precisamente las visitas al Molí de Mànec se complementan con la exposición l’Alfàs abans l’Alfàs que se puede visitar en el Espai Cultural Escoles Velles hasta el 15 de diciembre. El catálogo de la exposición, gratuito, se puede recoger, solicitándolo previamente, en la Casa de Cultura, ha recordado el concejal Manuel Casado.
El Molí de Mànec, catalogado espacio protegido por el Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi en 2015 por su valor histórico patrimonial, tras su rehabilitación y apertura al público se consolida como bien patrimonial de elevado interés turístico
Hay que recordar que el Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi, en colaboración con la UA, Universidad de Alicante, acometía la rehabilitación del Molí de Mànec. Una inversión de 250.000 euros, financiada a través del Programa Operativo FEDER 2014-2020 de la Generalitat Valenciana. Una actuación que no se limita a la conservación de las estructuras hidráulicas sino también el territorio y el patrimonio inmaterial asociado al regadío.
De los nueve molinos contabilizados en el Reg Major, la mayoría harineros, cinco están localizados en l’Alfàs. Fueron de gran importancia para la economía de la comarca hasta mediados del siglo XX, y son el testimonio de una cultura agraria y de unas formas de vida que ahora han desaparecido. Desde el punto de vista patrimonial estos molinos son muy interesantes.
El Molí de Mànec es un molino harinero situado en la orilla izquierda del barranco de Carbonera. Según las referencias históricas disponibles, se presupone que se construyó entre el siglo XVIII y principios del XIX. A lo largo de los años ha recibido otras denominaciones, como Molí de Carbonera, de Baix, Maset y de Montaner. Desde el año 1999 es de propiedad municipal. El molino consta de dos partes diferenciadas, la planta superior destinada a vivienda del molinero, de su familia y de sus trabajadores, y la parte inferior donde se ubicada la maquinaria y demás elementos necesarios para la molturación del grano. El Ayuntamiento de l’Alfàs, con su rehabilitación, salva de la ruina un elemento significativo del sistema de riego, para su reconversión en un Centro de Interpretación, un elemento turístico, enmarcado en un área con baja densidad de población, facilitando la integración de cultura y paisaje.