Instantáneas fotográficas captadas en Jordania en 2016 que dan forma al conjunto bautizado “In limbo there is control”. Del 12 de enero al 18 de febrero en la Fundación Frax de l’Albir.
En la obra de Rocío Villalonga existe un constante componente social y de denuncia, que exterioriza el compromiso de la artista con el mundo que le rodea. En esta ocasión, cuelga en la Fundación Frax (L’Alfàs del Pi, del 12 de enero al 18 de febrero) una serie de fotografías captadas en 2016 en Jordania, que dan forma al conjunto bautizado como “In limbo there is control”. Se trata de fotografías tomadas en puestos de vigilancia y vallado en zonas estratégicas de Jordania como espacios de control.
El término “limbo”, ya desaparecido en la doctrina católica, era el mundo entre los vivos y los muertos. El que no iba ni al cielo y el infierno iba al limbo, lo que implica la semejanza con el viaje migratorio en relación al abandono, lo errante y el destino desconocido. Se trata de una experiencia compleja en la que el sujeto, migrante en crisis por razones políticas, sociales o culturales, vive un intenso trance fantasmagórico con el espacio, ya sea el que abandona, el que recorre, el que ansía o al que llega.